Situación económico-financiera

Ha sido la recuperación de actividad de las mercancías más tradicionales las que han contribuido a este cierre en positivo, ya que tanto graneles sólidos como líquidos presentaron crecimientos del 2,92% y 2,96% respectivamente. Sin embargo, los nuevos tráficos tanto de contenedores como de tráfico rodado (ro-ro), han presentado una mayor resistencia a recuperar el terreno perdido durante la pandemia y cerraron el ejercicio 2021 con valores en negativo de entre el -3,84 y -2,42%. No obstante, la escasa participación aún de estas mercancías en el cómputo global del puerto de Huelva, han amortiguado el efecto final de estas leves pérdidas de tráfico.

El importe total facturado alcanzó un total de 46,21 millones de euros a final de ejercicio, incrementándose por tanto un 2,13% respecto a lo facturado en 2020. Se han liquidado por tasas y tarifas en 2021 casi un millón de euros más en valor absoluto que en 2020. Este crecimiento de los ingresos tiene su origen tanto en la subida de tráficos experimentada al cierre, como en la aplicación del RD26/2020 de medidas de reactivación económica ante el COVID-19, que supuso que al inicio de 2021 se liquidara gran parte del segundo semestre del 2020 de aquellas concesiones que habían solicitado ayuda, produciéndose con ello elevados importes de facturación tanto en tasa de Ocupación (+10,35%) como de Actividad (+12,00%) desde casi el inicio del ejercicio.

Las tasas de ocupación y actividad alcanzaron en el ejercicio 15,22 millones de euros, un 10,89 % superior que los 13,73 millones de euros facturados en 2020, comepensando los descensos en la facturación de T3 (-2,76%) generados por la reducción de un 5% en el coeficiente corrector y el aumento de mercancías en tránsito, así como la reducción en la T4, Tasa de pesca fresca (-72,25%), también inferior a la de 2020 a causa de la nueva concesión de la Lonja operativa desde el mes de febrero.

Los incrementos experimentados en las tasas procedentes de las concesiones, supusieron a final de año un aumento en la cantidad facturada de un millón y medio de euros respecto al ejercicio 2020, siendo este el motivo principal causante del incremento en ingresos.

Las tasas de utilización, más relacionadas con el tráfico portuario han mostrado un incremento del 0,53%, situándose en 23,77 millones de euros frente a los 23,64 millones de euros del ejercicio 2020. Esta circunstancia estaba prevista en los importes presupuestados, por lo que la facturación ha quedado un 10,32% por encima de las previsiones revisadas del ejercicio. La Tasa al pasaje se incrementó un +24,91%, la T1 tasa al buque lo hizo en un +6,90%, la T6 por utilización especial de la zona de tránsito un +20,22%, comparado con el ejercicio 2020.

El resto de la cifra de negocio, con un importe facturado de 4,44 millones de euros lo forman los ingresos por servicios tarifarios, que se han descendido en un -13,91%, debido al descenso en la “Tarifa por uso de recintos de dragado” y la “Dirección e inspección de obra” que fueron especialmente elevadas en 2020 y descendió -543.000 euros en 2021, debido al menor nivel de ejecución de obra, que descendió en un -29,65%.

Dentro de la partida de otros ingresos de explotación, donde se ha producido un leve descenso del -0,87%, tiene especial significancia los “Servicios varios” donde se incluyen las repercusiones de IBI’s y que en 2020 fueron elevadas por recibos de ejercicios anteriores.

Al margen de los ingresos comentados, hay que destacar la partida de ingresos financieros, donde se incluyen los ingresos generados por las posiciones de tesorería, aunque también se recogen intereses de demora, de apremio, aplazamientos o préstamos. Respecto a la primera partida, estos se han visto afectados negativamente por el descenso en los tipos de interés con la que las entidades financieras remuneran su pasivo, como consecuencia de la política monetaria del Banco Central Europeo para estimular la economía europea tratando de dar más liquidez al sistema financiero, habiendo desaparecido prácticamente estos ingresos, con solo 9.560,21 euros en 2021.

En cuanto a los gastos generados por la explotación, incluidas las amortizaciones, supusieron 42,74 millones, frente a los 43,99 millones de euros de 2020, dando lugar a un descenso del -2,86%, debido principalmente a la partida de reparaciones y conservación, donde en 2020 se llevaron a cabo importantes obras de reparación del paseo de la ría y en la vía ferroviaria por un accidente ferroviario, aunque en 2021 ya se comienza a percibir un incremento de estas partidas para atender el mantenimiento de las nuevas obras que se van recepcionando, también hay que considerar las provisiones por insolvencia de clientes, que principalmente se centra en el concesionario del centro comercial Aqualon, así como una caída del -6,36% en la partida de personal por el descenso en partidas de otros gastos sociales.

Respecto al presupuesto aprobado, la partida de gastos de personal se redujo en un -10,37%, suponiendo un menor gasto de -1.047.981,48 euros y la partida de otros gastos de explotación lo hizo en un -8,25% con un menor gasto de -1.635.094,87 euros, incidiendo de forma particular la menor contratación de servicios profesionales por importe de -930.233,91 euros y un menor gasto en la partida de otros servicios exteriores por importe de -413.241,88 euros.

Es importante reseñar que el fondo de compensación interportuario aportado ha sido de 1.303.000,00 euros, mientras que el recibido fue de 253.000,00 euros, resultando una aportación neta de 1.050.000,00 euros, que suman en el apartado de gastos de explotación.

El resultado antes de impuestos se situó en 2021 en 10,35 millones de euros, frente a los 6,57 millones de 2020. No obstante, teniendo en cuenta la previsión para el Impuesto de Sociedades de 3,42 millones de euros a favor de la Autoridad Portuaria, tras haber recogido los derechos de deducción en la cuota para ejercicios futuros, el beneficio final del ejercicio asciende a 13,77 millones de euros, frente a los 9,45 millones de euros del año anterior.

La rentabilidad anual objetivo, ha sido del 3,33%, algo superior al 2,80% del ejercicio anterior tras haber excluido de los ingresos y gastos que distorsionan el resultado, excepto el Impuesto de Sociedades.

Las ratios habituales de tesorería demuestran que se dispone de sobrada capacidad para hacer frente a las deudas, en particular, la ratio de tesorería inmediata para cubrir el pasivo corriente, se sitúa en un 3,50, cuando lo recomendable sería situarlo entre el 0,5 y el 1, donde la tesorería disponible fuese suficiente para atender el pasivo a corto plazo, sin que exceda más de lo necesario, para evitar los recursos ociosos. Esta ratio tan elevada se debe a que la tesorería disponible se está colocando a corto plazo por la baja remuneración en productos financieros tradicionales y ante la incertidumbre en los mercados financieros sobre las condiciones a largo plazo.

Durante el año 2021, donde los recursos procedentes de las operaciones han ascendido a 23,47 millones de euros y se ha mantenido un elevado volumen en la ejecución de obras, se ha producido un descenso del Fondo de Maniobra en -21,68 millones euros, situándose en 111,37 millones de euros.

La ratio de gastos de explotación entre ingresos de explotación en 2021 ha sido del 82,06%. Para los próximos ejercicios, soportando las amortizaciones de las nuevas inversiones que se realicen, esta ratio tiende a valores superiores al 100%, por lo que hacemos referencia a que el EBITA mantendrá unos niveles similares a lo largo de los ejercicios incluidos en el Plan de Empresa, garantizándose la estabilidad financiera.

En otro orden de cosas, cabe señalar que el Balance ofrece una imagen financiera y patrimonial muy sólida. El Inmovilizado se financia en su totalidad con Fondos Propios y no existe endeudamiento ni a largo ni a corto plazo, que no sea el derivado del normal funcionamiento de la Entidad.

En el Pasivo, el patrimonio neto representa el 95,16% del total y dado que el fondo de maniobra es muy holgado, la entidad está haciendo frente a sus compromisos de pago sin problemas. En este sentido, cabe recordar que se cumple con el periodo medio de pago a proveedores de 30 días establecido en la Ley de lucha contra la morosidad, habiéndose situado en 2021 en 11,72 días.